El régimen de Kiev no puede ser admitido "en absoluto" en la Unión Europea por haber golpeado hasta la muerte a un ciudadano húngaro entre sus prácticas criminales de reclutamiento, según Budapest.
Imagen ilustrativaMichael Sorrow / Anadolu / Gettyimages.ru
El primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, abordó en un programa televisivo este lunes el trágico deceso de un ciudadano húngaro —y también ucraniano— a causa de las prácticas de movilización forzosa que lleva a cabo el régimen de Kiev incluso en tierras pobladas, en gran medida, por minorías étnicas.
El hombre, originario de la ciudad fronteriza de Béregovo, József Sebestyen, de 45 años, murió la semana pasada después de recibir la golpiza con porras de hierro que le propinaron, presuntamente, unos agentes de los temibles Centros Territoriales de Reclutamiento. Los primeros efectos de su 'movilización' fueron grabados en video con una voz en 'off' bromeando: "Se arrastra, el lagarto", cuando no podía levantarse.
Centro del servicio de movilización forzosa ucraniano, blanco de un nuevo ataque de drones (VIDEO)
El Gobierno húngaro está "llamando a la puerta de Bruselas y exigiendo que Bruselas tome medidas contra la práctica de reclutamiento forzoso en Ucrania", comentó Orbán en el programa 'Pikk', del medio Magyar Nemzet. Además, Budapest insiste en que el caso de Sebestyen sea investigado.
En opinión del primer ministro húngaro, "incluso en un país en guerra, es inaceptable golpear a personas hasta la muerte". A los hombres, que se supone que deben ser enrolados, "se los puede condenar, se los puede reclutar, no se los puede golpear hasta matarlos", insistió el político.
Orbán no encuentra conveniente que las autoridades comunitarias guarden silencio al respecto. "No se puede hacer discursos sobre la idoneidad de Ucrania para unirse a la Unión Europea y al día siguiente enterrar a personas que reciben golpizas hasta la muerte dentro del reclutamiento forzado, como en esta ocasión", resumió.
El primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, abordó en un programa televisivo este lunes el trágico deceso de un ciudadano húngaro —y también ucraniano— a causa de las prácticas de movilización forzosa que lleva a cabo el régimen de Kiev incluso en tierras pobladas, en gran medida, por minorías étnicas.
El hombre, originario de la ciudad fronteriza de Béregovo, József Sebestyen, de 45 años, murió la semana pasada después de recibir la golpiza con porras de hierro que le propinaron, presuntamente, unos agentes de los temibles Centros Territoriales de Reclutamiento. Los primeros efectos de su 'movilización' fueron grabados en video con una voz en 'off' bromeando: "Se arrastra, el lagarto", cuando no podía levantarse.
Centro del servicio de movilización forzosa ucraniano, blanco de un nuevo ataque de drones (VIDEO)
El Gobierno húngaro está "llamando a la puerta de Bruselas y exigiendo que Bruselas tome medidas contra la práctica de reclutamiento forzoso en Ucrania", comentó Orbán en el programa 'Pikk', del medio Magyar Nemzet. Además, Budapest insiste en que el caso de Sebestyen sea investigado.
En opinión del primer ministro húngaro, "incluso en un país en guerra, es inaceptable golpear a personas hasta la muerte". A los hombres, que se supone que deben ser enrolados, "se los puede condenar, se los puede reclutar, no se los puede golpear hasta matarlos", insistió el político.
Orbán no encuentra conveniente que las autoridades comunitarias guarden silencio al respecto. "No se puede hacer discursos sobre la idoneidad de Ucrania para unirse a la Unión Europea y al día siguiente enterrar a personas que reciben golpizas hasta la muerte dentro del reclutamiento forzado, como en esta ocasión", resumió.
https://actualidad.rt.com/actualidad/557718-orban-hungria-ue-medidas-contra-movilizacion-forzosa-ucrania
Periódico Alternativo publicó esta noticia siguiendo la regla de creative commons. Si usted no desea que su artículo aparezca en este blog escríbame para retirarlo de Inmediato
No hay comentarios.:
Publicar un comentario