MARTIN HACTHOUN / PL – El gobernador de la provincia de Buenos Aires y candidato presidencial por el oficialismo, Daniel Scioli, prosigue hoy su campaña proselitista con una “Caravana por la Victoria” en la carrera electoral hacia los comicios primarios de agosto.
El evento en el que lo acompañan su compañero de fórmula a la Vicepresidencia, Carlos Zannini, y los precandidatos a la Gobernación bonaerense, Julián Domínguez y Fernando Espinoza ocupará toda la tarde en los municipios de Lomas de Zamora y Lanús.
Esta es la cuarta caravana que realiza en el conurbano bonaerense la propuesta presidencial de Frente para la Victoria (FpV) cuando hoy las encuestas le dan un margen de ventaja, aunque no muy holgado, sobre la coalición de centro derecha Cambiemos y mucho más amplio ante Unión por una Nueva Argentina (UNA).
Esos son los tres espacios políticos que más preferencia del electorado tienen, y después se ubican el Frente Cívico Progresista que lidera Margarita Stolbizer, el peronismo federal (opositor) de Adolfo Rodríguez Saá y los combinados de la izquierda trotskista.
Antes de la Caravana, Scioli concurrió a otros dos actos electorales, y tras su visita a Cuba el miércoles encabezó otro en La Plata el jueves y fue la figura central de un concurrido rally el viernes en Parque Norte, en Ciudad Buenos Aires.
Organizado para mostrar unidad dentro del justicialismo argentino, allí estuvieron 12 gobernadores y muchos funcionarios, legisladores e intendentes peronistas de todo el país en apoyo a la fórmula Scioli-Zannini a poco más de dos semanas de las primarias del 9 de agosto.
La actividad fue convocada por el instituto de formación de cuadros Gestar, dirigido por Diego Bossio, para dar un mensaje de ratificación del rumbo político del gobierno nacional que encabeza la presidenta Cristina Fernández y proponer su continuidad a través de la profundización del modelo en caso de que el FpV triunfe en los comicios nacionales del 25 de octubre.
La más reciente encuesta para las primarias de agosto, de la consultora Aresco, muestra que el FpV con el dúo Scioli-Zannini obtendría el 39 por ciento del sufragio, ante el 25,5 que conseguiría la fórmula del partido de derecha Propuesta Republicana (PRO), que lidera Mauricio Macri.
Si bien, ese margen es amplio -y otros sondeos le dan hasta 18 puntos de ventaja- cuando se le suma al porcentaje del PRO los que tienen las otras dos fórmulas presidenciales de la alianza Cambiemos, la diferencia entre esta y el FpV entonces se reduce a 39 por 32.
Los otros dos binomios de ese colectivo de centro derecha los encabezan la diputada Elisa Carrio, de Coalición Cívica, y Ernesto Sanz, de la Unión Cívica Radical.
Un escalón más abajo se ubica UNA, cuyo electorado en las primarias escogerá entre Sergio Massa, del Frente Renovador, y José Manuel De la Sota, de Democracia Cristiana.
Según Aresco, Massa cuenta con un 12,3 por ciento de los votos por 6,7 De la Sota, pero como coalición UNA tiene el favor del 19 por ciento de los votantes.
Más alejados están Stolbizer, Rodríguez Saá y Jorge Altamira, del Frente de Izquierda y los Trabajadores (FIT); todos con porcentajes que oscilan de 3 a 4 por ciento.
Pero hay un dato en el sondeo de Aresco que la dirección del FpV no puede pasar por alto: según la consultora el 41,8 por ciento de los encuestados dijo que prefería un cambio de modelo, mientras 33,5 quiere una continuidad con algunos ajustes y el 17,2 es partidario de un presidente que represente una continuidad sin cambios.
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