“Hacía tiempo que no se veía un abuso de poder y persecución política semejante”, dijo la ex presidenta.
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CFK denunció que hay una campaña del “Partido Judicial, instado por el Gobierno y con el explícito incentivo que le brindan los medios hegemónicos”. Advirtió que se busca “tapar” el plan económico de Macri que “sólo distribuye pobreza”.
Cristina Fernández de Kirchner calificó de “persecución política” y “abuso de poder” la serie de allanamientos simultáneos ordenados ayer por el juez federal Claudio Bonadio sobre una decena de inmuebles en Río Gallegos, El Chaltén y El Calafate relacionados con Los Sauces SA, empresa inmobiliaria cuya propiedad comparte con Máximo Kirchner. En una nueva carta que publicó en las redes sociales, la ex presidenta sostuvo que los procedimientos, transmitidos en vivo por los canales de noticias, fueron dictados con el fin de “tapar” la realidad socioeconómica del país a partir del ajuste que lleva adelante el gobierno de Cambiemos, y dijo por primera vez que un sector del Poder Judicial quiere verla presa. “Podrán hacer mil allanamientos más, podrán televisarlos, podrán meterme presa, su claro objetivo... Lo que nunca van a poder tapar son las consecuencias de un plan económico que sólo distribuye pobreza para los trabajadores, las clases medias y los pequeños y medianos empresarios”, aseguró.
Los allanamientos simultáneos de Bonadio incluyeron las oficinas de la inmobiliaria Sancho San Felice, dos complejos de departamentos situados en el centro de Río Gallegos, y otras propiedades que figuran a nombre de Los Sauces tanto en El Calafate como en El Chaltén. Bajo las órdenes del juez, efectivos de la Policía Federal también entraron a requisar la sede de la gobernación de Santa Cruz y el edificio de la Municipalidad de Río Gallegos. Allí, Bonadio buscaba, supuestamente, documentación vinculada con la empresa inmobiliaria de Cristina Fernández y Máximo Kirchner, a quienes investiga por presunto lavado de activos de origen ilícito.
Tras leer los titulares sobre los procedimientos, CFK apuntó contra la cobertura de algunos medios: “La sincronización informativa es sorprendente. Infobae, house organ de la embajada, en un ejercicio de clarividencia predijo el futuro: ‘Allanarán… para incautar documentación’”. Y en otro ejercicio de adivinación, TN “casualmente” se encontraba en Santa Cruz. ¿Transmitirán en vivo y en directo los allanamientos arrasando los códigos vigentes y los más elementales derechos y garantías que la Constitución Nacional reconoce a cualquier ciudadano?”, dijo.
La misma idea de cooperación entre un sector de los medios y del Poder Judicial para desviar la atención de los actos de gobierno la retomó más tarde en otro mensaje que tituló “Estado, derecho y desigualdad” y difundido también por las redes sociales. “En los últimos días, el Partido Judicial, instado por el Gobierno y con el explícito incentivo que le brindan los medios hegemónicos de comunicación ha intensificado su campaña de persecución y difamación, con un evidente doble objetivo de distraer a la población mientras el ajuste y la debacle económica aumentan la pobreza e instalar que mi gestión tuvo como único propósito cometer delitos de manera indiscriminada”, dijo (ver aparte).
En paralelo, la ex mandataria acusó a Bonadio de “ensañamiento”, por haber dictado los allanamientos en el marco de la causa por Los Sauces SA, un desprendimiento de la causa original por Hotesur SA, de la que fue apartado por decisión de la Cámara Federal, que concluyó que el juez había incurrido en irregularidades. “Debo ser la única ciudadana en la historia judicial argentina que es investigada por dos jueces federales de Comodoro Py en forma simultánea sobre una misma causa”, afirmó CFK. quien remarcó “hacía tiempo –décadas, diría– que no se veía un abuso de poder y persecución política semejante”.
Llamativamente, los allanamientos comandados por Bonadio sucedieron una semana antes de que la Sala I de la Cámara Federal resuelva si vuelve a unificar Hotesur y Los Sauces en manos del juez Julián Ercolini, lo que tiene previsto hacer el próximo 6 de julio. El abogado de la familia Kirchner, Alberto Beraldi, ya le pidió a Bonadio que se inhiba de seguir actuando, pero con las mediáticas medidas de ayer, el juez pareció haber redoblado la apuesta para seguir al frente de la causa.
“Esta no es la primera ni tampoco será la única causa que inventarán, ni la última ‘excursión de pesca’; lo vienen haciendo desde el año 2003 a la fecha. Nunca hubo en las últimas décadas presidentes más denunciados e investigados que los que ejercimos la primera magistratura desde el 2003 al 2015”, aseguró la ex presidenta. “¿Creerán que de esta manera lograrán disciplinar a la dirigencia política, sindical o social opositora? Tal vez podrán con algunos, o tal vez con todos. Conmigo no. No cuenten con ello”, disparó la ex presidenta, en el tramo más confrontativo de la carta.
Cristina Kirchner también se refirió a la reciente imputación de Mauricio Macri y del intendente de Lanús, Néstor Grindetti, por distintas causas relacionadas con empresas offshore. “¿Alguien sabe si al Presidente y su familia –todos involucrados en Panamá Papers– le allanaron sus casas, sus empresas o sus oficinas? ¿O en las de sus primos y amigos contratistas de la obra pública?”, se preguntó.
http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-303113-2016-07-01.html
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