El Gobierno de Donald Trump propone reducir el tiempo para pedir asilo a solo quince días. La comunidad inmigrante no da crédito a esta posible decisión.
La nueva regla, que había sido anticipada en el pasado mes de julio, reduce el plazo a 15 días para presentar el formulario de asilo, lo que ha provocado que los inmigrantes se sientan entre la espada y la pared, demás limitar tiempo a los indocumentados para buscar ayuda legal y documentar el caso ante un juez de inmigración.
Esta nueva propuesta se une a una larga lista de cambios al reglamento de asilo que el Gobierno viene haciendo por medio de órdenes ejecutivas desde el 20 de enero del 2017.
Según expertos en inmigración, el presidente Trump busca limitar al máximo las posibilidades de conseguir asilo a extranjeros que huyen de sus países por razones de raza, religión, nacionalidad o bien huir de la violencia como ocurre principalmente con los inmigrantes centroamericanos.
Según informes del Departamento de Inmigración, en las cortes hay un rezago casi 1.2 millones de casos acumulados. Las organizaciones pro inmigrantes aseguran que este nuevo cambio en los asilos afectará a miles y terminarán deportados.
Según informes de la Organización Nacional de Justicia de Inmigración, el Gobierno de Trump ha estado deportando de manera acelerada y en secreto a niños y adultos migrantes, incluidos los solicitantes de asilo.
Rosie Orbach, Los Ángeles (California).
fdd/mjs
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