Rusia acusa a Europa de dar luz verde a Ucrania para una nueva operación militar en la región independentista con su silencio ante un ataque a Donbás.
Kiev interpretará la posición silenciosa de Europa “como carta blanca para una operación militar en Donbás (una república separatista del este de Ucrania y fronteriza con Rusia) y para restaurar la integridad territorial por la fuerza”, indicó el domingo el jefe del comité internacional del Consejo de la Federación Rusa (el Senado), Konstantin Kosachev, citado por la agencia local de noticias TASS.
De este modo, el senador ruso reaccionó a un comunicado conjunto de los ministros de Exteriores de Alemania y Francia, Heiko Maas y Jean-Yves Le Drian, respectivamente, en el que expresaron el sábado su preocupación por el deterioro de la situación el este de Ucrania, pero luego manifestaron su “apoyo a la soberanía e integridad territorial” de Kiev e indicaron también que monitorean cuidadosamente la situación, en particular los movimientos de tropas rusas en la región.
Kosachev criticó a Europa por no señalar en su comunicado al ataque con drones de las fuerzas ucranias en la autoproclamada República Popular de Donetsk (RPD) en el que un niño fue asesinado.
“Ayer (el sábado), por primera vez desde julio de 2020, se llevó a cabo un bombardeo ucraniano de la RPD y murió un niño de seis años, pero no se sabe nada al respecto” en el comunicado europeo, lamentó Kosachev. En cambio, señaló, Occidente acusó a Rusia de los movimientos de tropas.
El acontecimiento se produjo cuando Moscú instó el domingo a la Unión Europea (UE) a exigir una explicación de Kiev tras este ataque con aviones no tripulados, en medio de una escalada de enfrentamientos armados entre las fuerzas prorrusas y las tropas ucranianas en la región.
“Rusia dice que no debe haber fuerza, sino solo un diálogo directo entre los estados en conflicto. El comunicado de los dos ministros no lo incluye, y en ese sentido, no tiene valor agregado y solo le echa leña al fuego del conflicto”, agregó el senador ruso.
Tanto el jefe de la Diplomacia europea, Josep Borrell, como el presidente de EE.UU., Joe Biden, prometieron su apoyo “inquebrantable” al gobierno ucraniano frente a lo que llaman la actividad militar rusa.
La tensión en el Donbás, escenario desde 2014 de una guerra entre el Ejército ucraniano y los separatistas prorusos, se ha disparado con acusaciones mutuas entre Kiev y Moscú de movilización de tropas y preparativos para una posible ofensiva.
Kiev trata de achacar a Moscú el conflicto en el este de su territorio; no obstante, las autoridades rusas rechazan las imputaciones y acusan a Occidente, encabezado por EE.UU., de incitar al país a iniciar un nuevo conflicto con los separatistas y desestabilizar las fronteras rusas.
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