El mandatario es la expresión brasileña de un grupo de ultraderecha dedicado a dilapidar las instituciones democráticas.
Jair Bolsonaro recibió los votos del 39% de los votantes. Una vez en el cargo, nunca cumplió con su responsabilidad de ser el presidente de la República de todos los brasileños y brasileñas. Pero fue en el enfrentamiento a la pandemia cuando se hizo evidente su desprecio por la vida, contradiciendo, con sus actitudes y palabras, su papel de autoridad constitucional, legal y políticamente cualificada para liderar las acciones contra el coronavirus. Las evidencias demuestran que no hay ningún otro caso de un jefe de gobierno que haya cometido tantos errores y de forma tan cruel.
Bolsonaro sorprendió al mundo al anunciar que cancelaría la compra de vacunas. Se negó a negociar la compra con otro fabricante. Lanzó una campaña publicitaria para incitar a la gente que desafiara las normas sanitarias adoptadas a nivel mundial. Despreció el dolor de un pueblo en duelo blasfemando contra un supuesto «país de maricas».
El mandatario se negó a usar máscaras en actos públicos e incluso celebró la muerte de una persona que falleció después de aplicarse la vacuna CoronaVac (un caso de suicidio, sin relación con la eficacia del producto). Nunca ha dejado de promover las aglomeraciones. Insiste en defender y gastar fondos públicos, que serían imprescindibles para el SUS, con medicamentos para un «tratamiento precoz» que, además de ineficaz, puede matar a quienes lo utilizan. Llevó más de un año crear un comité de crisis que en la práctica no funciona.
La gestión de la pandemia ya no es un problema nacional. Se ha convertido en una cuestión planetaria, en un contexto en el que se extiende el temor a los ataques de la actual administración federal contra el medio ambiente y los derechos humanos.
Bolsonaro es la expresión brasileña de una suerte de populismo autoritario, pero sobre todo de un grupo de ultraderecha que se dedica a dilapidar las instituciones más estimadas de la democracia. Los blancos permanentes de Bolsonaro son el poder legislativo, el poder judicial, el periodismo, la federación, la ciencia, las universidades, los sindicatos, las organizaciones que promueven los derechos y la independencia de la Policía Federal y otros organismos coercitivos.
Dedicado a promover la desinformación y el caos, acusa de comunista, corrupto o golpista a cualquiera que se atreva a criticarlo, algo que a menudo se convierte en un pretexto para odiosas persecuciones, ataques e intentos de criminalización. En realidad, el bolsonarismo es lo que golpea incesantemente la Constitución, incitando a la ruptura del orden democrático. El presidente también debe rendir cuentas sobre las investigaciones de los sospechosos negocios de la familia presidencial.
En el Congreso Nacional, que es el encargado de fiscalizar al jefe del Ejecutivo y de procesarlo y juzgarlo por delitos de responsabilidad, se acumulan los pedidos de destitución, que son ignorados. Antes por Rodrigo Maia y ahora por el actual por el presidente de la Cámara, Arthur Lira, que podría dar inicio a ese proceso. Líder principal de la agrupación de fuerzas de centro y centroderecha, el «centrão» [gran centro], él y su grupo se benefician de las numerosas enmiendas parlamentarias [recursos presupuestarios extra que el Ejecutivo distribuye a los congresistas] y del mantenimiento de una alianza con un presidente sin cualificación ni decoro para el cargo.
Nunca antes los legisladores federales, incluidos los que no pertenecen al «centrão», habían tenido tanto acceso a los recursos públicos y a los cargos del Poder Ejecutivo.
Cuando defendemos la destitución de Jair Bolsonaro, también consideramos que ese proceso debe estar absolutamente de acuerdo con las normas constitucionales y legales. Ello significa que es necesario iniciar la investigación ante las numerosas y graves acusaciones que pesan sobre el mandatario.
Nosotros, los abajo firmantes, nos comprometemos con la formación de un amplio frente social y político para enfrentar el caos generado por la actual gestión presidencial. Los que, contra toda evidencia, siguen apoyando a Bolsonaro deben prepararse para el juicio de la historia.
Traducción: Luiza Mançano, para Brasil de Fato.
Los firmantes:
Agência de Notícias de Direitos Animais (ANDA)
Associação Brasileira de Imprensa
A Nossa Pegada
Brasil de Fato
Congresso em Foco
De Olho nos Ruralistas
Inesc
Gestos
GTP+ Grupo de Trabalhos em Prevenção Posithivo
Le Monde Diplomatique Brasil
Marco Zero
Maré de Notícias
O Joio e O Trigo
Outras Palavras
Outra Saúde
Portal Catarinas
Plural
Rede Brasileira de Conselhos -RBdC
Si desea participar en la editorial, puede escribir al correo ojoioeotrigo@gmail.com.
Fuente: https://www.brasildefato.com.br/2021/05/12/editorial-por-que-defendemos-el-impeachment-de-bolsonaro
Periódico Alternativo publicó esta noticia siguiendo la regla de creative commons. Si usted no desea que su artículo aparezca en este blog escríbame para retirarlo de Inmediato
No hay comentarios.:
Publicar un comentario