Aproximadamente entre medio millar y setecientas mil personas (según fuentes) partieron ayer sábado de la gran terminal de transporte de San Pedro Sula, 180 kilómetros al norte de Tegucigalpa, rumbo a Corinto, frontera con Guatemala, en la primera caravana migrante del año con la intención ingresar a Estados Unidos, donde suelen ser rechazados por las autoridades en la frontera con México.
La concentración comenzó la tarde del viernes en la terminal de transportes, donde decenas de personas esperaban la salida de la caravana, que se produjo en la madrugada con un grupo de aproximadamente unas cien personas que partierón el sábado al amanecer caminando por la orilla de la carretera.
A este primer grupo de hondureños se fueron sumando nicaragüenses, haitianos, venezolanos y africanos que cruzan diferentes fronteras por puntos ciegos.
En Guatemala, las fuerzas de seguridad, policías y militares, así como personal del Instituto Guatemalteco de Migración, redoblaron los controles en Corinto para verificar que las personas cumplan con los requisitos de ingreso al país, de lo contrario se les impide el tránsito.
Disuelven la caravana
El Gobierno de Guatemala informó este sábado que unos 130 migrantes intentaron ingresar irregularmente al país.
Segú el Instituto Guatemalteco de Migración los migrantes fueron ubicados en su mayoría por las autoridades guatemaltecas, que revisarán la documentación para determinar si continúan en el país o son devueltos a sus países de origen. También se informó de otras a otras 14 personas que fueron detenidass al intentar ingresar de manera ilegal a Guatemala.
El ingreso irregular tuvo lugar en la frontera El Corinto, en el departamento de Izabal entre Honduras y Guatemala, a unos 300 kilómetros al noreste de la capital del país. A su llegada a Guatemala fueron disueltos o avanzaron en pequeños grupos por puntos ciegos de la frontera.
Más de tres años de caravanas migrantes
La última caravana de unas siete mil personas salió en enero del 2021. Fue desarticulada en Guatemala, al ser atacada con palos y gases lacrimógenas por cientos de soldados, por lo que los migrantes tuvieron que regresar a Honduras.
Una docena de caravanas han emprendido la marcha desde octubre de 2018 en San Pedro Sula. La mayoría han fracasado por los bloqueos de las autoridades estadunidenses.
La primera salió en octubre de 2018 desde Honduras rumbo al punto fronterizo de Agua Caliente, al sur de El Corinto. El Gobierno guatemalteco estableció el 6 de enero diversos “protocolos” tras conocer información sobre la posible salida de una caravana desde Honduras este 15 de enero. Los protocolos establecidos incluyen “puestos de control sobre la ruta migratoria” en “puntos estratégicos” para detectar a quienes intenten ingresar a Guatemala sin los requisitos requeridos por la ley.
La última caravana migrante masiva se registró en enero de 2021 con la participación de alrededor de 9.000 hondureños, quienes fueron bloqueados y disueltos en la frontera guatemalteca por las fuerzas de seguridad locales. Pero se calcula que un tercio del grupo sí consiguió su objetivo de llegar a Estados Unidos.
Cada año más de 500.000 guatemaltecos, hondureños y salvadoreños intentan emigrar de manera irregular a Estados Unidos para buscar mejores condiciones de vida, alejados de la pobreza y la violencia en la región.
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