Para celebrar el Día de la Revolución Agraria, Productiva y Comunitaria, este 2 de agosto el Presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, Luis Arce, protagonizó una concentración masiva de diversos actores y movimientos sociales en el poblado de Ucureña en Cochabamba.
A la cita popular llegaron innumerables pequeños productores campesinos, indígenas y originarios que hacen posible la seguridad y soberanía alimentaria del país.
En la ocasión, el Primer Mandatario señaló que, “estamos a casi 70 años de la firma del Decreto de Reforma Agraria, conquista que se logró gracias a la lucha del movimiento indígena, originario y campesino, y que buscó terminar con el latifundio y la servidumbre, y dotar de tierras a quienes no la poseían”, y agregó que, “La tierra tiene que ser de quien la trabaja. Sin embargo, el gobierno de entonces era de orientación liberal, lo que dividió la relación necesaria entre tierra y territorio, e impidió terminar definitivamente con la colonialidad. Después, con las instituciones de los gobiernos neoliberales, fue muy difícil enfrentar las relaciones sociales de producción capitalistas, resquebrajando aún más la relación entre lo indígena y lo campesino”.
Arce expresó que, “Sólo en el 2006, cuando con nuestro hermano Evo Morales iniciamos la Revolución Democrática y Cultural, anticapitalista, antiimperialista, antineoliberal, anticolonial y antipatriarcal con el Instrumento Político por la Soberanía de los Pueblos, MAS-IPSP, promulgamos la Ley 3545 de reconducción comunitaria del proceso de Reforma Agraria”, y añadió que, “Ahora debemos seguir profundizando nuestra Revolución Agraria, Productiva y Comunitaria. Nuestro Gobierno se ha propuesto concluir con el saneamiento de la propiedad agraria, sanear todas las tierras de nuestro Estado Plurinacional para otorgar seguridad jurídica a campesinos e indígenas”.
Asimismo, el Presidente Arce detalló que, “en la actualidad, el 55 por ciento de la tierra es propiedad de los campesinos, indígenas y originarios, mientras que el 30 por ciento es fiscal, y sólo un 15 por ciento está en manos del gran empresariado. El año 1992, apenas un 10 por ciento de los procesos de titulación estaban en manos de mujeres: hoy alcanza un 45 por ciento. Y juntas y juntos no permitiremos más avasallamientos ni tráfico de tierra”.
El Jefe de Estado también se refirió a los programas de apoyo a la pequeña producción agropecuaria con el propósito de satisfacer el mercado interno con alimentos sanos, orgánicos y mejores; así como a las políticas de promoción de producción de plantas generadoras de aceites que sustituyan las materias primas ligadas al diésel que Bolivia todavía debe importar.
Igualmente, Arce hizo mención a la importancia que el Gobierno le está dando a los temas de dotación de semillas, fertilizantes y riego tecnificado con enfoque de cuenca en diferentes regiones de Bolivia, a través de una inversión de 500 millones de dólares.
La concentración reunió a miles de corazones campesinos que forjan a diario y de sol a sol, el futuro agropecuario no sólo de Bolivia, sino que también labran con su ejemplo la alimentación y la vida del porvenir.
*La imagen corresponde a Presidencia del Gobierno de Bolivia.
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