A estas alturas del planificado genocidio del pueblo palestino de Gaza repugna escuchar las críticas de los cínicos gobernantes occidentales, los mismos que respaldan al estado colonialista de Israel manteniendo relaciones económicas y diplomáticas con él y armándolo para que prosiga su atroz campaña de limpieza étnica.
Este domingo, las fuerzas israelíes perpetraron una nueva masacre contra la población palestina en Rafah, la última ciudad de la Franja de Gaza antes de la frontera con Egipto. En el barrio de Tel Al-Sultan, al noroeste de la ciudad, al menos 50 personas murieron en un bombardeo que incendió las tiendas de refugiados. La Media Luna Roja denunció en un comunicado en su cuenta X que las tiendas de campaña para personas desplazadas ubicadas cerca del centro de las Naciones Unidas al noroeste de Rafah fueron el objetivo. El ataque ocurre tan solo unos días después de que la Corte Internacional de Justicia (CIJ) ordenara a las autoridades israelíes detener su ofensiva militar sobre la ciudad de Rafah.
Según la agencia Al Mayadeen, el domingo la aviación genocida empleó misiles y bombas de dos mil libras contra las tiendas de los refugiados en el campamento de Barkasat, adjunto a la UNRWA, después de declararlo “zona segura” e instar a la población a migrar hacia allí. Fuentes locales informaron a la agencia WAFA que al menos ocho misiles impactaron en las carpas de familias refugiadas instaladas recientemente.
La Defensa Civil Palestina informó que al menos 50 personas murieron en el ataque israelí en Rafah, en su mayoría mujeres y niños. El número de heridos sigue siendo indeterminado.
Francesca Albanese, relatora especial sobre los territorios palestinos, nombrada por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU pero que no representa a la organización, habló de “aún más horrores en el gueto de Gaza“. “Esta crueldad y flagrante desprecio por el derecho internacional es inaceptable“, escribió Albanese en su cuenta X.
La organización no gubernamental internacional Médicos Sin Fronteras advirtió en su cuenta X que estaba “consternada” por el ataque, que “demuestra una vez más que no hay lugar seguro” en Gaza. La organización afirmó que un centro médico que gestiona en la zona había recibido “decenas de heridos y más de 15 muertos”. La organización indicó que, con la red hospitalaria de Gaza destruida por los ataques de Tel Aviv, resulta imposible continuar con la atención médica a las víctimas, cuyo número aumenta diariamente. El personal de salud declaró que las familias, compuestas principalmente por mujeres y niños, fueron quemadas vivas.
El número de personas asesinadas por la agresión israelí desde el 7 de octubre llegó a las 35.984. Mientras que la cifra de personas heridas llegó a las 80.643. Se estima que miles de personas permanecen desaparecidas bajo los escombros, sus restos esparcidos alrededor de las carreteras o en fosas comunes clandestinas.
Huelga general en Jenin, en la Cisjordania ocupada hoy en protesta contra la masacre israelí contra los palestinos desplazados en Rafah (Fuente: Plataforma Palestina Hoy).
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