Trump recibió a Ramaphosa en la Casa Blanca este miércoles en una visita que captó el interés dada la tensión entre ambas naciones desde que el republicano regresó a la Oficina Oval.
El mandatario estadounidense alegó que «mucha gente está muy preocupada con respecto a Sudáfrica» e hizo imputaciones falsas sobre un genocidio en el país.
«Recogemos refugiados de muchos, muchos lugares, si percibimos que hay persecución o genocidio», dijo Trump, quien contó entre los presentes con Elon Musk, el magnate y aliado nacido en Sudáfrica devenido en acérrimo crítico de su tierra natal.
El Gobierno estadounidense expresó la víspera estar “abierto” a que el encuentro de Trump y Ramaphosa sirva para “reiniciar” la relación bilateral.
Los desencuentros entre los dos países escalaron con la expulsión en marzo del entonces embajador de Pretoria en Washington, Ebrahim Rasool, quien fue declarado persona ‘non grata’ tras criticar las políticas de Trump.
Además, los nexos sufrieron un deterioro por la reacción de Estados Unidos a una ley soberana de Sudáfrica, aprobada en el parlamento, relativa a la expropiación de tierras.
Trump denunció que esa ley allana el camino a eventuales violaciones de derechos humanos contra la minoría blanca afrikáner de Sudáfrica, o sea, los descendientes de colonos neerlandeses que llegaron al país a partir de 1652.
Por eso la administración republicana implementó un programa que acogerá a los afrikáners que aleguen sufrir “discriminación racial injusta”, lo cual les valdrá el status de refugiado en Estados Unidos.
El pasado 12 de mayo el Gobierno de Trump recibió a un grupo de 59 sudafricanos blancos que llegó bajo esa categoría, afirmando que enfrentan discriminación y violencia en su país, lo que niega Sudáfrica.
Ramaphosa rechazó que los nacionales que viajaron a Estados Unidos sean refugiados, porque no encajan en la descripción de que sufran persecución política, religiosa o económica.
Otro diferendo entre los dos países tiene que ver con la postura de Estados Unidos hacia Israel y contra la población palestina especialmente en la Franja de Gaza. Por sus acciones, Pretoria demandó por genocidio a Israel en la Corte Penal Internacional.
Ramaphosa llegó el lunes a Estados Unidos y su estancia concluirá mañana. Según la Presidencia sudafricana ambos dignatarios abordarán «asuntos bilaterales, regionales y mundiales de interés».
ro/dfm
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