Una ciudad estadounidense criminaliza la asistencia alimentaria y el voluntariado ciudadano para los desamparados, pero el activismo se opone a la medida.
A tal punto llega el problema que en Fort Lauderdale, si usted comparte un pan con un desamparado, podría ir a la cárcel.
Y es que esta es una ciudad como cualquiera en Estados Unidos... entre rascacielos bancarios, en la penumbra... la realidad de los habitantes de las calles. El 99 %... porque cualquier podría terminar en esta situación.
Desde un principio, la medida contra los indigentes de la ciudad tiene el objetivo de maximizar las ganancias...privatizando los espacios públicos.
Y para tal efecto, se ha demonizado al indigente, intentando marginarle aún más, mientras los espacios recientemente desocupados pasan a manos corporativas.
Marcelo Sánchez, Miami
akm/msf
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