Por Camilo Katari, Resumen Latinoamericano 20 de enero de 2025
En Estados Unidos, el 22 de noviembre de 1963 el presidente J. Kennedy fue asesinado, hasta hoy sólo existen especulaciones relacionadas con este magnicidio, pero también murieron activistas de los derechos civiles como Malcom X, y M. L. King, en nuestro continente personajes como Allende, Sandino, Bishop, en Africa, Kadhafi, Lumumba,y un largo etcétera, son algunos de los cientos de personas “incómodas” para las políticas de expansión imperialista.
En nuestro continente se implementó el “Plan Condor” ejecutado por las dictaduras militares más sangrientas con un saldo de 80.000 asesinadxs y 50.000 desaparecidxs.
En este siglo una nueva forma de golpe de Estado se ha puesto en marcha: El lawfare, sus primeras víctimas: Manuel Zelaya (Honduras) Fernando Lugo (Paraguay) Dilma Rousseff y Lula Da Silva (Brasil) Rafael Correa (Ecuador) y P. Castillo (Perú), este nuevo método reúne lo más perverso de la política, pues corrompe el corazón mismo del ordenamiento de una sociedad como es la justicia y cuyos operadores están destruyendo el sistema político y el principio liberal de la “democracia”.
Una vez que el Pueblo pierde la confianza en la democracia y su arquitectura política lo que indefectiblemente genera un proceso caótico y la subjetividad colectiva está predispuesta “para lo que venga” y lo que viene es el pensamiento “libertario” disfraz de una derecha pro-imperialista con prácticas fascistas. Estamos en pleno desarrollo de la “batalla cultural” ellos con las mejores armas de la tecnología mediática y nosotros clausurando medios alternativos.
En Bolivia las víctimas “peligrosas” en la llamada “erradicación del comunismo” se cobró muchas vidas entre ellas la del guerrillero heroico E. Che Guevara, de Inti Peredo (1967 -1969) y de los jóvenes idealistas de la guerrilla de Teoponte (1970) de productores campesinos en el valle de Cochabamba (1974), la del Jesuita Luis Espinal, M. Quiroga, de los dirigentes C. Flores, G. Vera (1980), es muy difícil cuantificar las víctimas del pueblo, de los ciudadanos comunes que defendieron la democracia en los sucesivos golpes en el periodo 1964 – 1980.
Todo este contexto señalado es producto de la política exterior de Estados Unidos, tesis desarrollada en 1823 por el presidente de entonces James Monroe, la estrategia de la expansión del “americanwayoflife” se convirtió en política de Estado.
Los “ministerios de colonias” (Embajadas de EEUU) comenzaron su trabajo de zapa y construyeron sus enclaves de poder en todos los países de la región, los “topos” locales se incrustaron en todos los recovecos del poder y de las organizaciones sociales, incluso pusieron en funcionamiento un centro de capacitación denominado “Escuela de las Américas” para los miembros de las Fuerzas Armadas de los militares latinoamericanos.
La primera gran ofensiva del imperialismo norteamericano se llevó a cabo durante y después de la segunda guerra mundial, la “guerra fría” se convirtió en una guerra caliente subterránea en todos los países del mundo.
En este siglo XXI estamos ante otra ofensiva del imperialismo norteamericano, que ya logró victorias en varios países, anulando la fuerza social acumulada, promocionando a sus marionetas. Bolivia se convirtió en un duro adversario, pero EEUU tenía su atención en medio oriente, pero la emergencia del Instrumento Político y el arribo al gobierno de un indígena puso en alerta a sus mecanismos de defensa y comenzó la estrategia para desmantelar el poder acumulado en los movimientos sociales. Con 20 años de trabajo, este desmantelamiento puede vanagloriarse de un triunfo, parcial, pero triunfo. Ahora está empeñado en dar la estocada final y justo cuando en Bolivia se recordará los 200 años de construcción de un Estado-nación.
La estrategia de dividir para ganar esta dando resultado, pero a diferencia de otros momentos de nuestra historia, el anti-imperialismo es una fuerza motriz, que está siendo sometida a una de las pruebas más duras y demuestran una consistencia que augura una larga batalla.
Este tiempo, es el más adecuado para recordar las palabras de Simón Bolívar: “Los Estados Unidos parecen destinados por la Providencia a plagar la América de miserias, en nombre de la libertad” palabras proféticas que son una bofetada para los “libertarios” de pacotilla, que se muestran como la única alternativa al caos creado, según ellos por el zurdaje, acompañado de tribus salvajes que requieren un rápido y eficaz proceso de civilización occidental.
Las batallas internas, pequeñas y cotidianas son las batallas históricas contra los imperios que no logran, pese a los 500 años transcurridos, doblegar la fuerza telúrica de las culturas ancestrales.
https://www.resumenlatinoamericano.org/2025/01/20/pensamiento-critico-el-temor-bolivariano/
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